el diario de viaje
El diario o cuaderno de viaje es un elemento imprescindible de todos los Viajes Hacia lo Salvaje.
Al finalizar el día reservamos unos 20 minutos para dar forma a nuestro diario o cuaderno de viaje donde podrás recoger palabras, dibujar, hacer un collage, lo que se te ocurra, será un pequeño lienzo donde dejar volar tu creatividad.
Pero por si no sabes cómo arrancar se te darán preguntas o reflexiones para romper ese bloqueo.
Será recuerdo, indudable.
Pero también la forma de asegurarnos de que el viaje no se queda en lo superficial y nos atraviesa.
Es importante que todo el grupo lo tenga claro.
Además, no tendrás que desvelar nada que no quieras, pero luego sí nutrir la reflexión y el diálogo que ha sembrado la jornada.
Son viajes que van a ser impactantes a muchos niveles, vamos a vivir emociones muy intensas y este diario nos va a ayudar a gestionarlas.
Y por si no ha quedado claro esto no va de que te conviertas en artista o que vayas a publicar un best seller, no va de que quede bonito y lo puedas enseñar, va de que te sirva y te ayude.
Porque no es fácil.
Con la edad preguntar se nos vuelve incómodo, da pereza, nos impacienta.
Vivimos en la sociedad de la solución y no de la pregunta tal y como dice María Ángeles Quesada en La virtud de pensar.
No queremos estar quietas, queremos tachar cosas de la lista, solucionar, recuperar el control.
Y eso que si paramos y escuchamos nuestro instinto sabremos lo que nos pasa antes de que la mente encuentre la explicación.
Pero no es culpa nuestra.
Es porque nos han enseñado que las emociones y los sentimientos son enemigos del “pensar bien” cuando realmente son fuente de sabiduría.
Necesitamos intuición, espiritualidad y emociones.
Y en estos viajes Hacia lo Salvaje lo vas a encontrar apuñaos si estás dispuesta a desafiarte y enfrentarte a las preguntas.
¿Lo estás?
Porque sé que el primer paso es el más difícil.
Así que si te apuntas a la comunidad de Hacia lo salvaje tendrás ese primer apoyo, aquí y ahora, en forma de regalo.
Son 5 preguntas.
¿Y por qué con preguntas?
Porque como te decía las preguntas te obligan a dar luz a las partes oscuras. Lo primero es tener consciencia.
La pregunta proporciona esa abertura para liberar el nudo, la angustia, eso que se agarra dentro.
También te digo, luego hay que desarrollar músculo para pasar a la acción, pero eso ya lo iremos viendo.
Ahora lo importante es formular las preguntas adecuadas para iniciar la siembra hacia la conciencia.
Y de eso va el regalo que tengo para ti.
Lo recibirás en el primer mail al suscribirte a la newsletter aquí:
ejercicio de escritura terapeútica
Le he pedido a una mujer que lleva años enfocada en todo esto a que nos regale esas 5 preguntas clave que te van a ayudar a arrancar en este proceso, o por lo menos, a replantearte en qué momento de tu vida estás.
Es un ejercicio de escritura terapeútica.
Y sí, es gratis a pesar de que estas preguntas son muy valiosas, de hecho, están inspiradas en un taller más completo que muchas mujeres pagan.
Se trata de escribir a la mujer salvaje que llevas dentro, por lo tanto, lo único que necesitas es papel y boli.
Porque como ya sabes, la escritura es una herramienta para el autoconocimiento y el autocuidado brutal.
Lo es porque hay una autocensura natural a todo lo que duele, pero escribiendo sale, o al menos, lo empiezas a vislumbrar.
Y aunque creas que no te hace falta, te invito a descargarte este regalo, igual te sorprendes.
Además, hay que procurar que ese fuego esté siempre atendido, alimentarlo, vigilarlo para que no se apague.
Practicar la escucha, hacerse preguntas, sentir curiosidad es vital para seguir avanzando en la dirección que queremos y este regalo también funciona para esto.
Si te he medio convencido y quieres tener las 5 preguntas para encender el fuego deja tu correo aquí:
Dar voz
Además lo del diariote va a venir mu bien. Me explico.
Los Viajes Hacia lo Salvaje van a ponerte delante de realides muy diferentes, porque quizá por ahí te vendan playas paradisíacas, cocolocos y unicornios. Aquí no.
No digo que no vayas a disfrutar y a pasártelo bien, pero es otra cosa. Y esto no es bonito de vender.
A mí no me agrada decirte que nos hemos vuelto esclavas de una exigencia de producción diaria insostenible y que hemos perdido el humanismo.
Pero es la cruda realidad. Y te lo voy a demostrar si te atreves a salir de la jaula. Además tendrá recompensa. Esto también te lo digo.
Porque conocerás a otras mujeres que han salido de ahí, que llevan a cabo iniciativas y proyectos que demuestran que otra forma de vida es posible.